La prevención y la detección temprana del cáncer de mama se basan en el autoexamen mensual, la exploración clínica anual y la mastografía cada dos años a partir de los 40 años.
Estas medidas pueden ayudar a identificar el cáncer en etapas iniciales, cuando hay más posibilidades de curación y tratamiento menos agresivo.
También se recomienda llevar un estilo de vida saludable, con una alimentación equilibrada, actividad física regular y evitar el consumo de alcohol y tabaco.
¡Si me toco no me toca!